Investigadores del Instituto de Carboquímica ha diseñado y fabricado una de las instalaciones más grandes del país para probar el funcionamiento de pilas de combustible.

Esta instalación se ha llevado a cabo en el marco de un proyecto de la PTI-TRANSENER+, y es una apuesta del CSIC por el desarrollo del almacenamiento estacionario de energía eléctrica a gran escala, con el objetivo de alcanzar una mayor integración de las energías renovables, superar sus problemas de intermitencia y acelerar la transición energética.